SANTO DOMINGO. De acuerdo con el Instituto Worldwatch actualmente más de la mitad de la población en el mundo viven en las zonas urbanas, aproximadamente 3,700 millones de personas, y se estima que para el año 2050 esta cantidad se duplique.
República Dominicana no escapa a esta realidad, según el último censo nacional de población y vivienda realizado en el año 2010 por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), sólo en el Distrito Nacional residían 965,040 habitantes.
Tomando en cuenta la estimación del Worldwatch, en un período aproximado de 34 años, en la demarcación vivirían alrededor de dos millones de personas. En su publicación titulada: “¿Puede una ciudad ser sostenible?, la situación del mundo”, el instituto analiza el crecimiento de las ciudades y el desarrollo urbano sostenible. Entonces, durante el 2016, que ha sido declarado por el gobierno dominicano como el año de fomento a la vivienda, cabe preguntarse si es el momento para plantear el tema de las construcciones sostenibles en el país.
Sobre esto, Diario Libre conversó con la arquitecta, especializada en sostenibilidad, Arline Morales, quien afirmó que esta es la única solución para responder a esta “explosión urbanística” y reducir la huella ecológica de los edificios y sus efectos negativos en el ambiente. La especialista aseguró que estos actualmente son la fuente principal de consumo energético y los responsables de un 30% a un 40% de todas las emisiones de dióxido de carbono.
La también fundadora de Green Planet Architects, primera red mundial de arquitectos sostenibles, aseguró que en el país es necesario que se creen políticas regulatorias para que los proyectos de construcción sean en la mayor medida sostenibles, y declaró que las regulaciones existentes en el Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y agrimensores (CODIA) y en el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) no están actualizadas y no se adaptan a este tipo de proyectos.
Además, agregó que deben otorgarse exenciones e incentivos que beneficien este tipo de construcciones en el país.
Por otro lado, el arquitecto español Luis de Garrido, reconocido mundialmente en el campo de la arquitectura ecológica, en una entrevista hecha por DL, corroboró con Morales, y comentó que al mundo tal y como lo conocemos, le quedan unos 20 años, ya que cada vez habrá menos recursos y hacer casas ecológicas será la única opción. En ese sentido, “los que antes empiecen tendrán mas recursos y sobrevivirán de forma más sencilla”, comentó.
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