SANTO DOMINGO. Para los líderes comunitarios de La Ciénaga y Los Guandules, uno de los principales desafíos del proyecto “El Nuevo Domingo Savio” será evitar que algunas personas traten de aprovechar la circunstancia para construir casuchas y luego reclamar viviendas.
Al sacerdote Edward Figueroa, párroco de la iglesia San Ignacio de Loyola , de La Ciénaga, le preocupa la situación y aunque personalmente no ha visto nuevas viviendas, sí tiene las informaciones de que algunas personas tratan de aprovecharse.
Aclaró que ya el censo que se hizo determinó quienes serán los beneficiados y que no se tomará en cuenta a los que vienen de otro lugar y manifestó que la misión de las organizaciones es fomentar el bien común, no que una persona se beneficie de una casa únicamente.
“Eso pueda ser que dañe el proceso porque si el Gobierno ya tiene un presupuesto para algo y lo quiere hacer así y ahora aparecen más casas, eso puede ser que dañe el proceso, pero vamos a hacer todo lo posible porque eso no suceda”, enfatizó.
Por su lado, el presidente de la Unión de Juntas de Vecinos de La Ciénaga y coordinador del Consejo de Organizaciones de Fe y Base Comunitaria de La Ciénaga (COFEBACOCI), Félix Quiroz, dijo que la gente que se ha querido pasar de lista no se saldrá con la suya.
“Vamos a tener que ser responsables, nos toca a nosotros actuar, es una parte muy difícil, nos vamos a ganar enemigos, pero tenemos que hacerlo con responsabilidad para poder lograr lo que se quiere”.
Habla el Presidente
El presidente Danilo Medina en su encuentro con los moradores para explicar el alcance del proyecto, apeló a la colaboración de los habitantes para que algunas personas no entorpezcan la obra construyendo casitas para que les den apartamentos. “Hablé el 27 de febrero de esta obra. Tan pronto hablé vinieron los vivos a construir ranchos para que les den casas. El que venga aquí a construir un rancho para que le den una casa, lo va a perder”.
El mandatario solicitó a los moradores del sector Domingo Savio ser aliados de la comisión que trabajará en el proyecto que se tomará su tiempo porque es una gran obra.
“Alguna gente se va a desesperar, pero sepan que tienen años viviendo en estas condiciones indignas. Nosotros queremos devolverles la dignidad a las personas. A eso vinimos esta tarde aquí, para que ustedes también puedan decir que se incorporan a la vida civilizada”.
El mandatario informó que el Gobierno trabajará unido a las comunidades para que en unos dos años y medio o tres vean el cambio que va a experimentar la zona para beneficio de miles de personas de esta área históricamente abandonada y les pidió que no se desesperen.
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