El vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), César Dargam, reveló que en República Dominicana más de un millón de empleados han sido suspedidos de sus puestos de trabajo como consecuencia de las medidas dispuestas por las autoridades para enfrentar la pandemia del coronavirus COVID-19.
Dargam dijo que las zonas franca llegaron a cerrar el 100% de sus operaciones, mientras que el resto de la industria está operando entre un 50% a un 60% de su capacidad habitual. Indicó que para los hombres y mujeres de empresas del país lo más importante es la salud y la vida de la población, y por eso colaboran con las autoridades en el combate al COVID-19.
Apertura gradual
Entrevistado en el programa D´ Agenda, por Telesistema Canal 11, Dargam explicó que se hace necesario, tan pronto la situación sanitaria lo permita, una apertura gradual de las actividades económicas. Agregó que ningún empleador quiere tener su empresa cerrada ni a sus trabajadores suspendidos, más bien quiere recobrar operaciones y poco a poco ir generando el flujo que requiere porque la economía necesita esa dinamización, pero la prioridad en estos momentos es lo sanitario.
“Si nosotros tomamos las cifras de esta semana del Fondo de Asistencia Solidaria que se ha creado, el famoso FASE 1 y el FASE 2, nos daremos cuentas que ya supera el millón de personas que han sido suspendidas de su trabajo“, ratificó.
Dijo que las medidas de distanciamiento ha generado distintos tipos de empresas, las que están operando porque están dentro de la excepción, las que han cerrado para reducir el cúmulo de personas, ajustarse al toque de queda o baja en la demanda, y muchas otras que han tenido que cerrar completamente.
Zonas francas operan al 30%
Paralización “Lo único seguro en esta crisis es que nada es seguro, y las cifras cambian todos los días”, dijo Dargam.
Prácticamente llegaron a cerrar completamente y hoy con una reapertura parcial y gradual rondan un 30%.
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