REDACCIÓN. El hombre de negocios que supuestamente mató al futbolista brasileño Daniel Correa Freitas dice que lo hizo después de encontrar al mediocampista en su ropa interior tratando de violar a su esposa.
El cuerpo de la estrella de Sao Paulo fue descubierto en Sao Jose dos Pinhais, una ciudad en el estado de Paraná, en el sur de Brasil, con sus genitales aislados y casi decapitados.
Los sospechosos han sido nombrados como Edison Brittes Junior, de 38 años, su esposa, Cristiana Brittes, y su hija de 18 años, Allana Brittes.
Edison dio su versión de los eventos y le dijo al programa Brasil Urgente en TV Bandeirantes que encontró al mediocampista de 24 años en la fiesta de cumpleaños de su hija.
“[Daniel] había entrado, se había quitado la ropa y había cerrado la puerta”, dijo Edison. “Llamé a la puerta de mi habitación y cuando la abrí, él estaba encima de mi esposa y ella gritaba y suplicaba ayuda”.
“Lo que hice fue lo que haría cualquier hombre, porque la mujer que estaba allí no era mi esposa, era toda mujer en Brasil. Podría ser tu hija, hermana, madre o esposa. En ese momento, fue mi esposa, Cris, con quien he estado casado por 20 años “.
Añadió: “Los medios de comunicación dijeron muchas cosas. Mi esposa nunca tuvo nada con Daniel, no importa mi hija.
“Los rumores siempre comienzan pero la verdad saldrá a la luz. Sé que hice lo que hice, quiero que todos los observadores piensen qué harían para mantener la integridad moral de su familia y ayudar a una mujer pequeña y frágil.
“Cuando lo eché de mi esposa, lo tiré al suelo y evité que fuera violada por ese monstruoso bastardo”.
Los amigos de Edison supuestamente trataron de impedir que atacara a la estrella de Sao Paulo, que pertenecía a un club equivalente a la Premier League, pero “no pudieron hacerlo” porque estaba enojado.
Informe de los medios locales Daniel había estado en la fiesta de cumpleaños de Allana Brittes en la casa de la familia y había enviado mensajes a un amigo que decía que “iba a comer” a la “madre de la niña del cumpleaños”.
Y surgió una foto de Daniel sonriendo junto a una mujer inconsciente, identificada en los medios locales como Cristiana, que se cree que le envió a su amigo.
Se dice que la hija de Edison le dijo a los reporteros que había oído gritos desde la habitación de su madre y que Daniel no había dicho nada cuando lo atraparon.
Ella dijo que había conocido a Daniel hace un año, pero nunca había estado “involucrada” con él.
La investigación está en curso
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