A pesar de que las provincias María Trinidad Sánchez y Samaná se encuentran en alerta roja por el paso del huracán Irma, residentes en los municipios Nagua y Sánchez continúan en sus casas de madera y zinc, muchas ubicadas en los alrededores de ríos y playas.
Rafael Santos denunció que las autoridades no están realizando ningún operativo de prevención, ya que no han acudido a sus hogares ni les han ofrecido ayuda alguna.
“¿Usted cree que es posible que nosotros nos quedemos en estas casitas de madera, al lado del mar? Se preguntó, al indicar que “las autoridades no ha pasado por aquí, ni siquiera el personal de los comedores económicos nos han brindado asistencia, no tenemos a nadie, estamos huérfanos”, dijo el nativo de Nagua.
No obstante, el coronel Marcelo González, de la Defensa Civil, afirmó que los organismos de socorro se enfocan en los operativos de prevención, conjuntamente con el ayuntamiento de este municipio.
Por el momento el oleaje se mantiene en calma y el cielo está ligeramente nublado.
González señaló que la entidad de socorro solo cuenta con tres unidades de bomberos en toda la provincia María Trinidad Sánchez, pero dijo que cuentan con el apoyo del cabildo de la ciudad.
Algunos residentes han tomado sus propias precauciones, al retirarse ellos mismos de las orillas del mar, otros aseguran sus techos de zinc para que el viento no se los lleve, mientras que unos que otros restan credibilidad a la amenaza del huracán.
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