Llevamos mucho tiempo soñando con vuelos hipersónicos que nos lleven de un lado del mundo a otro en cuestión de una hora o unos minutos (puestos a desear…).
Los años pasan y de momento nadie nos proprociona esa forma de evitar vuelos de 13 horas que terminan dejándonos pegados al asiento de una manera irremediable. Esto quizá cambie pronto, dado que la buena gente de Boeing sigue trabajando en los que serán los aviones del futuro, más exactamente aviones hipersónicos.
Lo que se espera que pueda hacer este avión será volar en velocidad Mach 5 como mínimo, lo que significaría que podría desplazarse por los cielos a 3900 millas por hora. Si tenemos en mente que el Concorde, que destaca por encima de la media por su potencia y capacidad, se queda en 1354 millas por hora, no hay duda de que significará un cambio realmente destacado.
La buena noticia es que el proyecto es real y que ha sido presentado en la conferencia AIAA de Atlanta, donde incluso se ha mostrado una imagen de lo que podríamos esperar. Lo denominan como el primer concepto de vehículo hipersónico que tendrá capacidad para transportar pasajeros. La promesa a la que hacíamos referencia en el título es real: entre Londres y Nueva York se podrá viajar en solo una hora en vez de las siete habituales a las que nos sometemos hoy día.
¿Y cuánto tardaríamos de Londres a otros destinos? En París estaríamos en 4 minutos, en Venecia en 11 minutos, en Atenas en 23 minutos y en Dubái en 52 minutos. A Tokio tardaríamos una hora y media, mientras que hasta Los Ángeles el tiempo sería de 2 horas y 14 minutos. Son cifras que si las comparamos a las actuales nos dejan con la boca abierta por todo lo que supondría de una vez por todas para los viajes internacionales.
El problema, y ahora es cuando os damos el bajón, es que el equipo de Boeing comenta que este es un plan que tienen para desarrollar en plazos de entre 20 o 30 años. Es decir, que no vayamos pensando en viajar al otro extremo del mundo en una hora dentro de poco. Sí se cree que será posible llegar a este nivel de rendimiento dentro de unos plazos, pero todavía hay mucho trabajo que hacer y hay barreras que derribar, sobre todo a la hora de ofrecer este tipo de servicio a los pasajeros. Pero aún así, es un avance que nos permite seguir soñando.
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