El ministro francés del Interior, Christophe Castaner, ha ordenado a las autoridades del país el refuerzo de la seguridad en lugares públicos y en eventos deportivos culturales y religiosos, tras la explosión de un artefacto en Lyon, este del país.
"Acabo de dar consignas de vigilancia a los prefectos para reforzar la seguridad de los sitios que acogen a público y de los eventos deportivos, culturales y de culto", escribió Castaner en su cuenta de Twitter
Además, el ministro agregó que está siguiendo la situación en coordinación con el prefecto de la región (delegado del Gobierno) y con la fiscalía.
Tanto Castaner como el primer ministro, Édouard Philippe, han anulado su presencia esta noche en el último acto de campaña de su partido antes de las elecciones europeas.
Las fuerzas de seguridad buscan a un hombre que, según pudieron grabar las cámaras de videovigilancia, colocó un artefacto junto a una panadería en una calle peatonal del centro de Lyon, que hizo explosión poco después de las 17.30 hora local (15.30 GMT).
Según los medios franceses hay al menos 13 heridos, todos ellos leves, y la mayoría han sido trasladados a hospitales de la ciudad.
La Fiscalía de París, encargada del antiterrorismo, ha abierto una investigación por los hechos, lo que indica que las autoridades privilegian por ahora la hipótesis terrorista.
El propio presidente francés, Emmanuel Macron, se ha referido a lo sucedido en Lyon como un "ataque", si bien todavía se desconoce su naturaleza.
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