“Dime qué siembras y te diré qué cosechas”. Esta frase, semejante a la frase bíblica, puede aplicarse a las personas que luchan por alcanzar sus metas.
Tanto es así que, al emplearla en su vida cotidiana, al final logran su cometido. Esto es lo que sucede con Andrea Díaz de Moya, una joven creativa, observadora y optimista que ha comenzado a sembrar sus primeras semillas para cosechar mañana los frutos deseados.
Desde muy temprana edad, según cuenta, sintió su pasión por la escritura y la pintura, lo que la llevó a experimentar y a salir de su zona de confort, y es entonces cuando asume el reto de escribir y publicar su primer libro, ‘Chaotic innocence poems and paintings’, una recopilación de 60 poemas y 25 pinturas que expresan sus pensamientos de cada día durante un año, así como su percepción de la realidad y su excepcional imaginación.
“Muchos de estos poemas y pinturas manifiestan las inquietudes, preocupaciones y observaciones típicas de la adolescencia: cambios, amor, pensamientos, pérdida y relaciones. También son una reflexión sobre situaciones que afectan nuestra sociedad, desde mi perspectiva”, expresa Andrea.
Cuenta que la idea de escribir el libro inició como un proyecto en el colegio, en el que debía escribir varios poemas. Al mostrárselos a su padre este quedó encantado y se los enseñó a su madre, motivándola a que escribiera un libro de poemas.
“La pregunta de mi padre: ‘¿Por qué no escribes un libro’, quedó dando vueltas en mi cabeza durante meses, hasta que un día de repente me dije: ¿Y por qué no hacerlo? Finalmente, en los primeros meses del 2016, me propuse la meta de hacerlo realidad y publicarlo al final del año”, señala la joven.
Todo proyecto tiene su motivación, pero la motivación no es la misma para todos los proyectos, considera Andre. En su caso, admite su inspiración para escribir y pintar fue la necesidad de expresar quién es, así como sus ideas y perspectivas sobre los diferentes temas que la vida le presenta, ya sea respecto a sus vivencias personales o a la sociedad en que vive. “También surge por la idea de ayudar a jóvenes de mi edad, pues al leer mis poemas, ellos pueden sentirse identificados con algunos de estos o simplemente movidos a reflexionar. Además, entiendo que la escritura es una forma de provocar debate y crear conciencia sobre temas importantes”, destaca la escritora.
Entre sus géneros literarios favoritos destaca la novela y la poesía, y no deja de citar a sus autores preferidos, entre ellos Karen Hesse, Kiera Cass, Sarah Kay, Maya Angelou, Edgar Allan Poe, Marie Lu y Jesse Andrews.
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