Numerosos puentes peatonales del país se encuentran en progresivo deterioro producto de la oxidación, agujeros en el pavimento y un estado de notable corrosión. Ese es el panorama evidente al ingresar a uno de ellos para realizar el habitual recorrido de un extremo a otro por las distintas avenidas y calles de la ciudad capitalina.
La muestra de ellos, subyace en tramos peatonales como el de las avenidas John F. Kennedy con Máximo Gómez, 27 de Febrero con Máximo Gómez, así como el puente ubicado en el kilómetro nueve de la Autopista Duarte.
Tan solo hacer contacto con el pavimento destrozado, con agujeros de gran tamaño, se ubican de forma zigzagueante por entre los “pasadizos” de estos puentes que sirven de plataforma para realizar el diurno y nocturno paso para dirigirse a lugares de trabajo, estudio u ocio. Naturalmente, los cables que sostienen estos puentes peatonales se están rompiendo.
La pesadilla se hace casi palpable al contemplar el peligro que puede presentar para múltiples personas que hacen su cruce por puentes de estas zonas, ya que “la inseguridad y el temor” se hace latente, y que según ellos, puede provocar un mal mayor.
La basura y la pestilencia cobran parte importante del territorio que “une” zonas que resultarían tediosas si se atravesaran a pie, producto del gran tránsito de vehículos por estas vías de comunicación.
Oxidación
El hierro tiende a despedir partículas de pintura, de un color claro, allí la suciedad es evidente, con tan solo tocar o palpar ese material. Un tono negroide sobresale en forma polvorienta indicando que son producto del humo que despiden los medios de transporte que circulan por distintas calles.
El hierro tiende a despedir partículas de pintura, de un color claro, allí la suciedad es evidente, con tan solo tocar o palpar ese material. Un tono negroide sobresale en forma polvorienta indicando que son producto del humo que despiden los medios de transporte que circulan por distintas calles.
El puente ubicado en el kilómetro nueve de la Autopista Duarte es uno donde prima “un evidente caos” ya que de forma continua los hierros se ven afectados por la combustión que emanan los vehículos, y al igual que la oxidación que está cada vez presente en cada uno de los barrotes de estos.
Los pedigüeños y vendedores, también participan en esta “escena”, configurando un clima, distinto al que se pretende al momento de la creación de estructuras de este tipo y de gran relevancia para el país y los usuarios de estos servicios.
LOS CABLES ROTOS DEL PUENTE PEATONAL
El LISTÍN DIARIO publicó en la portada de su edición de ayer una dramática fotografía de uno de los cables que se rompió en el puente peatonal ubicado en la intersección formada por las avenidas John F. Kennedy y Máximo Gómez lo cual representa un peligro para miles de usuarios que utilizan a diario esa estructura, incluso para acceder a la estación de transferencia de las líneas uno y dos del Metro de Santo Domingo. Todavía anoche ningún personal se había presentado a resolver el problema.
El LISTÍN DIARIO publicó en la portada de su edición de ayer una dramática fotografía de uno de los cables que se rompió en el puente peatonal ubicado en la intersección formada por las avenidas John F. Kennedy y Máximo Gómez lo cual representa un peligro para miles de usuarios que utilizan a diario esa estructura, incluso para acceder a la estación de transferencia de las líneas uno y dos del Metro de Santo Domingo. Todavía anoche ningún personal se había presentado a resolver el problema.
Esta situación parece reflejar la apatía que existe en torno al mantenimiento y reparación de estas importantes estructuras para el cruce de peatones y evitar accidentes.
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