En estos momentos en los que el Covid-19 amenaza a la humanidad, no se trata solo de trabajar para satisfacer la demanda de los servicios básicos, específicamente, los de primera necesidad. Hay que garantizar seguridad sanitaria y mantener buenos precios para contribuir a la prevención del contagio y a la sobrevivencia del presupuesto económico.
Es así como, fieles a su compromiso de brindar eficiencia a sus consumidores ante cualquier situación, los ejecutivos de Plaza Lama han puesto en marcha un plan de servicio, dentro y fuera de las tiendas, para evitar posibles contagios de Covid-19 y garantizar experiencias de compras rápidas y con conciencia. Además del uso obligatorio de guantes y mascarillas mientras estén de servicio, todo el personal de recibe chequeo de temperatura corporal y orientación a la entrada de cada turno sobre las medidas de seguridad y prevención a tomar, en beneficio de ellos y de los clientes de las tiendas.
A través de un comunicado, resaltan que sus supermercados mantienen su horario especial, de 7:30 a 8:30 de la mañana para adultos mayores de 60 años, personas que tengan condiciones de alto riesgo (hipertensión, diabetes y enfermedades respiratorias, así como embarazadas). Para el resto de los clientes están abiertos de 8:30 de la mañana a 6:30 de la tarde, permitiendo una cantidad limitada de clientes dentro de las sucursales para conservar el distanciamiento social. Aunado a esto, en las filas de espera fuera de los establecimientos, promueven en los clientes una distancia mínima de 1.5 metros entre una persona y otra.
“Nuestro propósito es cumplir con nuestro compromiso de ofrecer a nuestros clientes eficiencia en servicios y productos, ante cualquier situación, incluso de crisis. En el caso de los momentos que vivimos hoy día, ponemos todo nuestro esfuerzo para que la experiencia de compra sea la más segura y justa. Trabajamos de forma mancomunada con nuestros suplidores estratégicos para asegurar el correcto abastecimiento.
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